¿Tienes planeado visitar Londres en un viaje relámpago que sólo durará un fin de semana? ¡No te preocupes! Dos días es mucho tiempo y seguro que aprovecharás al máximo cada minuto para poder ver lo más importante y llevarte una buena experiencia. Para hacerte la vida más sencilla, aquí va mi proposición para ver Londres en 3 días.
Día 1
El día de llegada al igual que el de salida, siempre hay que contarlo como medio día puesto que es muy probable que hasta las 15:00 no estés del todo instalado y listo para salir a disfrutar de la ciudad. Una vez el tema alojamiento esté resuelto, la primera para obligatoria es el famosísimo reloj de Londres, el Big Ben, donde también podrás ver la abadía de Westminster y cruzando el Támesis por el puente de Westminster te plantarás a los pies del ojo de Londres o como allí lo llaman London Eye.
Disfruta de un paseo por la ribera del río por la parte de Southbank y cruza por el puente peatonal de Hungeford para subir por la avenida de Northumberland y llegar directamente a la plaza más conocida de la city: Trafalgar Square. Esta plaza es digna de admirar, pues en ella encontrarás el National Gallery y esculturas de hierro con mucha historia detrás. Además, desde allí podrás ver el Big Ben en una imagen digna de fotografiar.
Siguiendo hacia Leicester Square podréis cenar en cualquier local de los alrededores, hay montones de bares y restaurantes (incluyendo cadenas de comida rápida) donde sentarte. Y después de cenar no te olvides de pasear por la transcurrida Leicester Square y disfrutar de los espectáculos callejeros que diariamente puedes encontrar. Y por supuesto, entrar a la tienda de M&M’s para hacerte la ya mítica foto con los “Beatles”.
Día 2
Para aprovechar al completo la luz del día, os aconsejo que visitéis los parques de Hyde Park, Green Park y St James’s Park. Tres parques espectaculares y de película que son el hogar de animalitos (cisnes y ardillas, entre otros muchos) muy simpáticos que te enamorarán. Y donde pasear se convierte en tranquilidad, a pesar del turismo. Entre parque y parque (Green Park – St James’s Park) podrás ver el palacio de la reina Isabel II, el conocidísimo Buckingham Palace, con sus ya míticos guardias. Si tenéis la oportunidad de ver el cambio de guardia, ¡hacedlo! porque es un espectáculo digno de presenciar.
Para ir a comer, caminaría 10 minutos desde St James’s Park hacia Piccadilly y por allí encontraréis cantidad de bares. Eso sí, no os olvidéis de pasar por la que es considerada como la Time Square inglesa. Después de comer, uno de los lugares que debes visitar es sin duda el Museo Británico. Allí podrás pasar la tarde entre momias del antiguo Egipto, jeroglíficos y miles de reliquias de los distintos pueblos que han existido en la historia del mundo.
Día 3
El último día y para despedir Londres puedes aprovechar para ir a visitar y pasear por las calles del famosísimo y extravagante mercado de Camden. Allí encontrarás todo tipo de souvenirs, y tiendas realmente curiosas que te dejarán con un buen sabor de boca. Ahora sí, ¡rumbo al aeropuerto!
Este post es obra original de María Mora