Lance Batchelor, presidente de Domino’s Pizza, una de las cadenas de restaurantes que más empleados tiene en Londres, ha pedido públicamente al gobierno que permita la entrada de más inmigrantes a Reino Unido. El empresario ha asegurado que actualmente, su cadena cuenta con más de 1000 empleos vacantes «a los que los británicos no están dispuestos a aplicar».
Batchelor, que recientemente anunció que dejará el mando de la compañía el próximo mes de abril, explicó cómo la falta de mano de obra está impidiendo la expansión de la compañía en Reino Unido. Concretamente, Domino’s pizza necesita urgentemente cocineros y chóferes (de moto). «Ya no sabemos que más debemos hacer para encontrar empleados: desde el endurecimiento de la ley de inmigración hace dos o tres años, cada vez nos es más difícil contratar, especialmente en Londres y la zona sudoeste.
«Podríamos contratar a más de 1.000 empleados mañana en Reino Unido si tuviéramos candidatos para ello», asegura el empresario. Domino’s cuenta con unos 25.000 empleados actualmente en todo Reino Unido y sólo en la capital cuenta con una plantilla de más de 3.300 personas en 109 establecimientos. Cada año, la cadena abre una media de 45 tiendas, ofreciendo 2500 nuevos puestos de trabajo.
Lance Batchelor, que solicitó la ayuda del gobierno ante este problema, advirtió del serio problema que existe en Gran Bretaña, donde hay una gran cantidad de vacantes en el sector servicios que los británicos no están dispuestos a aceptar. «Todas nuestras sucursales en Londres están operando a la mitad de su capacidad debido a este problema, si lográsemos conseguir más staff podríamos gastar más dinero en marketing y esto ayudaría a impulsar la economía», concluye el presidente.
Según las últimas estadísticas de la agencia de trabajo «Adzuna» las principales empresas británicas están contratando un 5% más durante este invierno: sobretodo en el sector hospitalario, logística y ventas. Además, se calcula que Londres y la zona sur concentran el 40% de los empleos vacantes de todo Reino Unido.
El presidente de Marks & Spencer ha defendido la postura de Batchelor: «los inmigrantes que vienen a Reino Unido están más preparados para trabajar más horas cobrando un salario menor». «No deberíamos culpar a los ciudadanos búlgaros o rumanos por venir a nuestro país a ocupar los puestos de trabajo para los que los británicos no están preparados», añade.
Alba García
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