En el anterior post hablábamos de la entrevista de trabajo. Pero no debemos pasar por alto la importancia de presentar un Curriculum vitae atractivo y adaptado al modelo inglés. Para esto dedicaremos un par de artículos, pero antes de nada hablaremos de los datos personales que debemos incluir -y los que es aconsejable evitar- en nuestro CV.
El éxito de un curriculum se basa en las primeras impresiones. El diseño, el orden de la información, la extensión… Pero si hay una sección que juega un papel importante en esto de las primeras impresiones, ésa es la de nuestros datos personales. Incluir información de más o de menos en este apartado puede significar un adiós directo a esa entrevista de trabajo que tanto deseamos. Explicamos los datos más importantes que debemos incluir y los que no, para evitar discriminaciones por sexo, nacionalidad, religión, etcétera.
Nombre: Procura escribirlo en un tamaño mayor y una tipografía atractiva. No olvides que el curriculum vitae es marketing personal y todo esfuerzo por aparentar ser único es necesario.
Estado civil: No estamos obligados a incluir información sobre nuestra vida privada, pero podemos hacerlo si creemos que nuestra situación familiar puede beneficiarnos en el proceso de selección. Por ejemplo, si el puesto de trabajo requiere que hagamos horas extra y trabajemos los fines de semana, nuestra situación será ventajosa si somos solteros y sin hijos. Si por el contrario queremos formar parte de una empresa que requiere compromiso y valora la estabilidad personal, quizás incluir nuestro estado civil de «casado» o con hijos pueda verse como una ventaja, aunque, desgraciadamente, en el caso de las mujeres esto suele ser una dificultad más a la hora de acceder al puesto deseado.
Fecha de nacimiento: Al igual que el estado civil, nuestra fecha de nacimiento no es un dato obligado en un curriculum. Sin embargo, es recomendable añadirlo, ya que nuestra candidatura será «más transparente». En algunos casos se producen discriminaciones por edad (tanto por ser demasiado jóvenes como mayores). Por lo general, lo que cuenta es la experiencia que tengamos.
Nacionalidad: A excepción de las candidaturas para puestos de trabajo en el Gobierno, es mejor no incluir nuestra nacionalidad para evitar discriminaciones.
Datos de contacto: E-mail, teléfono, dirección… Aquí juega un papel importante la lógica. No incluyas el email de tu actual trabajo, y si quieres evitar que te busquen en las redes sociales, crea una nueva dirección de correo para tu búsqueda de empleo. Es obvio también: cuidado con direcciones de correo electrónico que puedan dar una imagen equivocada de nosotros (ejemplo: Rubitalove@…crazyforyou@…). Además, es muy importante que tu número de teléfono y tu dirección sean ingleses (resulta poco formal aplicar para un puesto de trabajo en Inglaterra con tu dirección postal en Cuenca). Si comienzas a buscar empleo antes de mudarte, escribe la dirección de un amigo.
Foto: No, no y no. Borra la foto de tu curriculum inglés. Está mal visto incluirla por razones de discriminación física. En Inglaterra no te contratarán (o al menos eso pretenden demostrar) por tu cara bonita.
Información adicional: Como decíamos antes, tu curriculum vitae no es más que un elemento de marketing personal. Aplica tu propia estrategia: Si estás aplicando para un empleo de diseñador web incluye direcciones de algunas páginas que hayas creado; si aplicas para un empleo de redactor, añade un link a tus blogs personales y si deseas un trabajo de comercial, no olvides añadir que tienes carné de conducir y vehículo propio (si es verdad, claro).
Alba García